En relación al hecho de formar parte de un Gobierno, el presidente de Castilla-La Mancha ha expresado que “es, en realidad, un compromiso. Cuando se está en un Gobierno, se está al margen primero del partido propio. Segundo, de intereses espurios. Tercero, con capacidad de raciocinio sobre los intereses que, no siendo oscuros, son particulares. Se está realmente midiendo todos los días y analizando qué es el interés general. Y cuando además un Gobierno, lo que hace es pensar que el interés general es que le vaya bien al gobierno, malo, se equivoca siempre. Los gobiernos que no deciden pensando en el 100 por cien terminan estrechando su margen de confianza. Hay que pensar en el 100 por cien de la gente, aunque no se llegue. La gente nos coloca aquí para gobernar, para tomar decisiones. Y evidentemente sabemos de esto, sabemos cuáles son las reglas del juego, sabemos evidentemente que hay momentos y momentos. Y encontrar la oportunidad para una decisión a veces es lo más difícil de la tarea de gobernar”.