El Gobierno de Castilla-La Mancha apoya la inserción sociolaboral de madres vulnerables con hijos a cargo
La consejera de Bienestar Social, Aurelia Sánchez, ha indicado que “la protección y acompañamiento a las mujeres en situación de vulnerabilidad social cuando tienen niños pequeños es de gran importancia para evitar situaciones de exclusión social y cronificación de la pobreza”. Además, “desde el gobierno del presidente Emiliano García Page tenemos el compromiso de trabajar para romper la transmisión de la pobreza de padres a hijos” ha aseverado la consejera.
En este sentido, la titular de Bienestar Social ha destacado que “el tiempo aproximado en el que las usuarias están en este centro es de 13 meses, y su estancia está orientada a la integración social y laboral, lo que les permite acceder a una vivienda y un trabajo que garantice su estabilidad y autonomía económica”.
Toledo, 20 de septiembre de 2020.- El Gobierno de Castilla-La Mancha favorece la reducción de la transmisión intergeneracional de la pobreza ofreciendo atención residencial a mujeres solas con hijos menores a cargo en situación de vulnerabilidad social, en colaboración con el Instituto Secular San Bonifacio en la ‘Casa Santa Lioba’ en Talavera de la Reina.
La consejera de Bienestar Social, Aurelia Sánchez, ha indicado que “la protección y acompañamiento a las mujeres en situación de vulnerabilidad social cuando tienen niños pequeños es de gran importancia para evitar situaciones de exclusión social y cronificación de la pobreza”. Además, “desde el gobierno del presidente Emiliano García Page tenemos el compromiso de trabajar para romper la transmisión de la pobreza de padres a hijos”, ha aseverado la consejera.
El Centro de Atención Residencial ‘Casa Santa Lioba’ atiende en la actualidad a quince personas, diez de ellas menores de edad. El personal que trabaja con las usuarias vive en el mismo edificio, lo que facilita la atención voluntaria y continuada.
En este sentido, la titular de Bienestar Social ha destacado que “el tiempo aproximado en el que las usuarias están en este centro es de 13 meses, y su estancia está orientada a la integración social y laboral, lo que les permite acceder a una vivienda y un trabajo que garantice su estabilidad y autonomía económica”.
Apoyo hacia una vida normalizada
Las madres usuarias realizan talleres en los que se abordan temas como la alimentación saludable, cuidados e higiene, alimentación del menor, organización doméstica y del gasto, cuidados de las personas mayores o enfermas y prevención de accidentes domésticos.
Esta formación se acompaña de habilidades lingüísticas que ayudan a las usuarias a su incorporación al entorno social y laboral. El apoyo a estas mujeres finaliza cuando son capaces de acceder a una vivienda normalizada y consiguen una estabilidad económica que les permite mantener unas condiciones mínimas para ellas y sus hijos.
Muchas de las mujeres que participan en este programa presentan necesidades relacionadas con regulaciones administrativas, tanto de sus documentos como de los menores a su cargo. Todas ellas reciben asesoramiento administrativo para cumplimentar las inscripciones de los hijos recién nacidos, los permisos de residencia o las partidas de nacimiento.
Además, este proyecto incluye refuerzo escolar destinado a garantizar que los menores continúen con sus estudios en condiciones de normalidad e igualdad de oportunidades.