"La intención es cumplir tres objetivos. En primer lugar, la renovación del Parque Móvil de la Junta. De los 760 vehículos que son susceptibles de ser cambiados por modelos de estas características, el 80% tienen una antigüedad superior a los 10 años y el 26% tiene una antigüedad superior a los 15 años. Por lo tanto, nos obligan a soportar unos costes de mantenimiento y de averías muy elevados. Por ejemplo, en el año 2017 hemos calculado que tendrían un coste medio por vehículo de 800 euros. El segundo objetivo es colaborar en la reducción de CO2 y de gases contaminantes de efecto invernadero, fomentando un transporte sostenible, que minimice el impacto medioambiental en nuestra región. Concretamente, estos vehículos suponen un 20% de reducción de CO2 y de un 80% de emisiones de óxido de nitrógeno. El tercer objetivo es impulsar una política de eficiencia energética desde la Administración regional, que nos permita, además de reducir los costes de mantenimiento y por averías, abaratar nuestros costes energéticos".