El Gobierno regional ha invertido 5.000 euros en el refuerzo de la señalización vertical de la carretera CM-2103 a su paso por la localidad conquense de Olivares de Júcar para mejorar la seguridad vial en un punto peligroso.
 
El director provincial de Fomento, José Ignacio Benito, ha visitado la localidad junto al alcalde, Pablo Olivares, y personal técnico de Servicio de Carreteras, para comprobar cómo ha quedado esta actuación que se llevó a cabo en el mes de agosto.
 
Benito ha explicado que en la carretera CM-2103, dentro de la travesía de la población de Olivares de Júcar y junto a intersección con la carretera N-420, existía un tramo peligroso, dado que la proximidad del centro de salud y de la piscina municipal hacen que sea una vía muy transitada tanto por los vehículos como por los peatones que cruzan de forma habitual.
 
Es por ello que desde la Dirección Provincial de Fomento se ha considerado necesario invertir en reforzar la señalización vertical de la zona para advertir a conductores y peatones de la peligrosidad del tramo y de la existencia de pasos de peatones.
 
Para ello se han instalado una señal triangular de 900 mm de lado de advertencia de peligro por la existencia de peatones, dos señales cuadradas de 600 mm de lado de información de presencia de paso de peatones, un cartel de 1200x1700 mm con fondo amarillo flúor con la inscripción del texto “bandas sonoras” y dos conjuntos de dos señales compuestos por una triangular de 900 mm de lado de advertencia de peligro por la existencia de resalto en calzada y una circular de 600 mm de diámetro de prohibición con velocidad máxima de 50 km/h y. Todos estos elementos cuentan con un alto nivel de reflectancia e incluso alerta luminosa.  
 
El director provincial de Fomento ha valorado también la disposición del Ayuntamiento de Olivares de Júcar, que ha decidido completar esta actuación y ha repintado los pasos de peatones, además de habilitar varias Bandas Transversales de Alerta (BTA).