"Ya tenemos todo en marcha. Ahora empiezo a escuchar una especie de música, que seguro no le está sentando bien a los familiares de los enfermos mentales, que hay que tener en cuenta hoy más con esta pandemia. Es que lo que ha crecido, se ha multiplica por dos con la pandemia: los enclaustramientos, las retricciones. Se ha disparado, pero no aquí, en todo el mundo es el problema de la atención a las familias y a las personas que requieren atención mtenal a la que no voy a renunciar, porque además lo anuncié el año pasado, que genera muchos empleos y mucha economía. Creo que despues de un  año, y muchos ayuntamientos me lo habeís ofrecido. Pero, desde luego, la enfermedad mental ni ningún tipo de discapacidad está para que se les relegue a un segundo plato"