Personal de urgencias y emergencias se forma para actuar y tomar decisiones ante situaciones críticas en pacientes con vía aérea difícil
Una decena de profesionales de urgencias hospitalarias y extrahospitalarias han aprendido a manejar los últimos dispositivos y adquirir habilidades decisivas en el manejo de este tipo de pacientes.
Guadalajara, 13 de abril de 2017.- El servicio de Anestesiología y Reanimación y Terapéutica del Dolor del Hospital Universitario de Guadalajara, dependiente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, ha llevado a cabo la segunda edición del Curso de Vía Aérea Difícil en Medicina de Urgencias, coordinado por la Unidad de Calidad, Investigación, Docencia y Formación de la Gerencia del Área Integrada de Guadalajara.
Este curso, dirigido a médicos de urgencias hospitalarias, extrahospitalarias y emergencias, tiene como objetivo capacitar a los profesionales para que puedan asegurar una correcta atención sanitaria a los pacientes en riesgo de hipoxia que presentan dificultad para establecer y mantener una vía aérea permeable, dando a conocer los últimos avances tecnológicos y favoreciendo la toma de decisiones en situaciones críticas, así como el trabajo en equipo.
Se pretende que los participantes sean capaces de reconocer qué pacientes presentan alto riesgo de vía aérea difícil, bien sea por razones fisiológicas, anatómicas o relacionadas con el entorno, cómo sería una oxigenación de emergencia y ventilación con dispositivos faciales, orales, supraglóticos, intubación traqueal y crico-traqueostomía.
Asimismo, el curso ahonda en las capacidades personales y la toma de decisiones, cómo conocer y preparar el entorno laboral o en la recepción de pacientes con control de vía aérea inadecuado o inestable, atendiendo también a supuestos fisiopatológicos con dificultades específicas como traumatismos, parturientas o personas asmáticas.
Para todo ello, la dinámica del curso, que se prolonga durante cuatro días, se basa en el diálogo y participación directa del alumno para buscar las mejores soluciones y recursos, y cuenta con una parte teórica, prácticas en quirófano y con maniquíes y equipos, así como una reflexión en grupo o debriefing para revisar ideas y conceptos adquiridos y estudiar propuestas de mejora.
Durante la jornada, la doctora Patricia Ruiz ha hablado de la toma de decisiones y cambio de planes, y a lo largo de las distintas sesiones del curso los doctores Elena de la Fuente, Ramón García Quiroga, Beatriz Amorós y Lourdes Muñoz abordan temas como la vía aérea difícil como problema del área de salud, los factores predictivos de dificultad y la aplicación de la metodología CRM (Crisis Resource Management), un método de trabajo para situaciones críticas basado en promover la seguridad abordando las habilidades conductuales y cognitivas para gestionar de forma eficaz todos los recursos disponibles.
Las dificultades en el manejo de la vía aérea son una causa conocida de morbilidad no sólo en quirófano sino también en otros entornos asistenciales como urgencias, cuidados intensivos, sedación en técnicas invasivas y emergencias extrahospitalarias.
En los últimos años han aparecido gran cantidad de dispositivos auxiliares para facilitar el control y la asistencia de la ventilación, así como habilidades que pueden contribuir a salvar la vida o evitar lesiones graves.
En este sentido, ha indicado el jefe de Anestesiología, Reanimación y Terapéutica del Dolor, José Ramón Rodríguez Fraile, se trata de “mejorar las capacidades técnicas y organizativas de los profesionales y que las adapten a su entorno de trabajo”, lo que constituye un objetivo básico para la seguridad del paciente reconocido por la Organización Mundial de la Salud, los protocolos de Helsinki y el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad.