Toledo, 13 de febrero de 2018.- La Unidad de Rehabilitación de Suelo Pélvico del Complejo Hospitalario de Toledo, dependiente del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha, cumple este año una década desde su puesta en marcha en 2008 en el centro sanitario para atender, fundamentalmente, pacientes con incontinencia urinaria leve o moderada y desde entontes han atendido a un total de 1.750 pacientes.
 
Según los datos recogidos durante esta década, el 85 por ciento de las pacientes atendidas con esta patología consiguen mejorar tanto la clínica como la calidad de vida tras completar el tratamiento en la Unidad de Rehabilitación de Suelo Pélvico del Hospital de Toledo.
 
Esta Unidad comenzó a funcionar con carácter multidisciplinar manteniendo relación con los servicios de Ginecología, Urología, Digestivo y Cirugía General del centro sanitario fundamentalmente. 
 
La Unidad ha atendido desde su puesta en marcha un total de 1.750 pacientes y está compuesta por dos médicos especialistas en Rehabilitación y tres fisioterapeutas con formación específica en el tratamiento de las disfunciones de suelo pélvico, dos de ellas en el Hospital Virgen de la Salud y la tercera en el Hospital Provincial.
 
Las doctoras María García Bascones y Mª Carmen López Zarzuela,  médicos responsables de la Unidad, explican que “desde su inicio en el año 2008 se ha ido ampliando las patologías de suelo pélvico que se valoran en la consulta de Rehabilitación. Aunque la patología más frecuente sigue siendo la incontinencia urinaria de esfuerzo leve – moderada, actualmente se están valorando y tratando pacientes con prolapsos, vejiga hiperactiva, dolor pélvico crónico o  incontinencia fecal”.
 
En cuanto a la incontinencia urinaria de esfuerzo, la rehabilitación es una alternativa a la cirugía en aquellos casos con criterio de tratamiento conservador y siempre contando con la colaboración de la paciente.
 
En este sentido, aseguran que existe un amplio consenso entre los especialistas en cuanto al tratamiento de esta patología basado en ejercicios de rehabilitación y medidas higiénico dietéticas, capaces de resolver con éxito el 85 por ciento de los casos leves-moderados.
 
Por su parte, la fisioterapeuta Pilar García indica que el suelo pélvico es un conjunto de músculos, ligamentos y tejidos que cierran la cavidad abdominal por su parte inferior, a la vez que sujetan y mantienen en su posición normal la vejiga, el útero y el recto.
 
Cuando se debilita el suelo pélvico puede desarrollarse incontinencia urinaria, prolapso uterino o disfunciones de suelo pélvico, que pueden requerir de tratamiento rehabilitador para corregir o mejorar dichas patologías.
 
La alteración en el suelo pélvico de la mujer es muy frecuente después del parto. En algunos casos el problema es transitorio, en ocasiones se agrava con la edad y puede afectar a la calidad de vida de las mujeres.
 
Información, ejercicios y monitorización
 
Una vez valorada en la consulta la paciente por el médico rehabilitador, la fisioterapeuta comienza el tratamiento pautado, incidiendo en la información acerca de la anatomía pelviana.
 
Habitualmente, el tratamiento consiste en ejercicios de suelo pélvico para fortalecer la musculatura, en muchas ocasiones ayudados por un dispositivo electrónico, llamado ‘biofeedback’, mediante el cual la paciente puede ver en un monitor en que momento contrae la musculatura perineal y cuando no lo hace, permitiéndole reconocer la musculatura que se quiere trabajar y potenciarla. 
 
En algunos casos puede ser necesario añadir otras técnicas más específicas, como puede ser la electroestimulación intracavitaria o la  neuromodulación del nervio tibial posterior.
 
La rehabilitación de los músculos del suelo pélvico supone una opción de tratamiento para atacar en su origen la incontinencia urinaria y diferentes disfunciones del suelo pélvico.