Toledo, 2 de diciembre de 2015.- El consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo ha mantenido una reunión con los representantes de la Denominación de Origen ‘Manchuela’ y ha dado el visto bueno al proyecto presentado para constituirse como organización interprofesional agroalimentaria.
 
Tras la reunión el consejero ha valorado “muy positivamente” la propuesta y ha destacado que “están dando el paso que hay que dar en el compromiso con el sector vitivinícola”, al tiempo que ha señalado que los técnicos de la Consejería “ya están trabajando con ellos para que cuanto antes tengamos la Interprofesional del Vino de la Denominación de Origen Manchuela”.
 
Martínez Arroyo ha destacado que “es un paso muy importante porque en las interprofesionales tienen que estar presentes los viticultores y las bodegas –y dentro de las bodegas, las cooperativas y las bodegas particulares- es decir, todos aquellos que tienen algo que decir y, en este caso, hay un compromiso absoluto”.
 
Según ha señalado el consejero, “todas las bodegas del ámbito de la Denominación de Origen Manchuela están en el proyecto y eso ocurre pocas veces, lo que pone de manifiesto el interés por su parte y la apuesta por la comercialización y por la promoción, que son las dos cuestiones claves en las que tiene que trabajar una interprofesional como esta”.
 
Por su parte, el presidente de la Denominación de Origen ‘Manchuela’, Juan Miguel Cebrián, se ha mostrado satisfecho con la reunión y ha hecho referencia a que en la actualidad están constituidos como “organización de productores” y quieren pasar a ser “interprofesión” y para ello están modificando los estatutos con el fin de conseguir ese reconocimiento por parte de la Consejería que les permita hacer extensiones de norma, certificar e impulsar la propia Denominación de Origen cuanto antes.
 
La Denominación de Origen ‘Manchuela’ está formada por 1.500 agricultores propietarios de 6.000 hectáreas de viñedo de municipios de las provincias de Albacete y Cuenca. Su variedad autóctona es denominada ‘Bobal’, cuyo grano de uva es mediano, redondo y zumoso. Es muy apropiada para la obtención de vinos rosados, produciendo unos vinos brillantes de color fresa con tonos vivos de buena intensidad aromática, con notas frutales y florales como la fresa, frambuesa, sandia, violetas, pasando en boca por unos vinos de gran frescura, delicados y con gran recuerdo frutal.