El Servicio de Emergencias 1-1-2 Castilla-La Mancha ha coordinado la actuación en 66 accidentes de tráfico graves durante el primer semestre de 2020
Dado que este periodo coincidió con la declaración del Estado de Alarma como consecuencia de la pandemia originada por la COVID-19 y la consiguiente disminución de la circulación por las carreteras de la región, se redujeron en un 18 por ciento los accidentes graves en relación con los seis primeros meses del año pasado.
Un alto porcentaje de los siniestros se han producido por la salida de la vía del vehículo, siendo la principal causa de los accidentes de tráfico relevantes ocurridos en las carreteras de la región.
Toledo, 10 de octubre de 2020.- El Servicio de Atención y Coordinación de Urgencias y Emergencias 1-1-2 de Castilla-La Mancha, organismo perteneciente a la Consejería de Hacienda y Administraciones Públicas, ha coordinado la ayuda de los grupos de intervención en emergencia en los 66 accidentes de tráfico graves que se han contabilizado durante el primer semestre del presente año en la Comunidad Autónoma, en los que han fallecido un total de 35 personas.
Dado que este periodo coincidió con la declaración del Estado de Alarma como consecuencia de la pandemia originada por la COVID-19 y la consiguiente disminución de la circulación por las carreteras de la región, se redujeron en un 18 por ciento los accidentes graves en relación con los seis primeros meses del año pasado.
Así, mientras que en el primer semestre de 2019 se contabilizaron 81 accidentes de tráfico gráfico, en los primeros seis meses de este año esta cifra se ha reducido hasta los 66.
Junio ha sido el mes con mayor siniestralidad, registrando 19 accidentes de carácter grave, seguido de enero, con 17. Con cifras significativamente inferiores están febrero con 10, mayo con 9 y marzo con 6. Abril ha sido el mes en el que se han producido menos accidentes de tráfico de carácter grave, con 5 siniestros registrados.
Sin embargo, pese a reducirse el número de accidentes, sus consecuencias han sido más negativas, ya que en el primer semestre de 2019 murieron 28 personas a causa de estos siniestros y en el mismo periodo del presente año ha habido que lamentar el fallecimiento de 35 personas.
Como en años anteriores, un dato a destacar es que una parte importante de estos incidentes se han producido por la salida de vía del vehículo, sin que interviniese ningún otro coche como causante del siniestro. En concreto, 27 de los accidentes ocurridos en estos primeros seis meses del año se han debido a este motivo, lo que representa algo más del 40 por ciento del total de accidentes registrados. En ellos fallecieron nueve personas.
Tal y como indican los datos de la Dirección General de Tráfico la distracción, el exceso de velocidad y el consumo de alcohol y drogas están detrás de la mayoría de estos incidentes.
Por provincias, Ciudad Real y Cuenca han sido en las que se ha producido un mayor número de incidentes, contabilizando un total de 19 en cada una de ellas, con Toledo muy cerca al registrar 16. En las carreteras de la provincia de Albacete se produjeron siete accidentes, mientras que en las de Guadalajara, con cinco, es en la que hubo menos siniestros.
Coordinación de recursos desde el 1-1-2
Los accidentes de tráfico son uno de los incidentes, atendidos por el Servicio de Urgencias y Emergencias 1-1-2 de Castilla-La Mancha, en los que es necesaria la intervención de un mayor número de recursos.
Así, desde la Sala del 1-1-2 se movilizan y se coordina la labor que realizan las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, normalmente efectivos de la Guardia Civil, y los servicios sanitarios, que despliegan la mayor parte de sus recursos como médicos de urgencias, ambulancias, UVI y, en numerosas ocasiones los helicópteros medicalizados, fundamentales para el traslado urgente de heridos graves.
Los bomberos son también una parte importante en este tipo de siniestros, dado que en ocasiones los afectados por los accidentes quedan atrapados en el interior de los vehículos, siendo necesaria su excarcelación. Por último, también interviene el personal de mantenimiento de carreteras, cuya labor es imprescindible a la hora de normalizar el estado de la vía y la circulación.