El presidente García-Page firma con la Fundación Bancaria “la Caixa” un acuerdo marco de colaboración en materia de acción social y cultural
En virtud de este convenio, la entidad bancaria catalana dedicará a acción social en Castilla-La Mancha un total de 10 millones de euros este año, lo que supone un millón más que lo que aportó en 2016.
Este montante se dedicará principalmente a los proyectos sociales dirigidos a luchar contra la pobreza infantil, a mejorar la vida de los mayores y los colectivos con necesidades especiales, y a facilitar la integración laboral de las personas más desfavorecidas.
Toledo, 6 de septiembre de 2017.- El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha firmado este miércoles un acuerdo marco de colaboración con el presidente de la Fundación Bancaria “la Caixa”, Isidro Fainé, en materia de acción social, educativa y cultural para el año 2017. Este acuerdo, suscrito en el toledano Palacio de Fuensalida, dará lugar a los convenios específicos de cada programa, vinculados a las distintas consejerías del Gobierno regional.
En virtud de este convenio, la entidad bancaria catalana dedicará a acción social en Castilla-La Mancha un total de 10 millones de euros este año, lo que supone un millón más que lo que aportó en 2016, un montante que se dedicará principalmente a los proyectos sociales dirigidos a luchar contra la pobreza infantil, a mejorar la vida de los mayores y los colectivos con necesidades especiales, y a facilitar la integración laboral de las personas más desfavorecidas.
En el ámbito sanitario, desde el año 2009 la Fundación Obra Social “la Caixa” financia el Programa de Atención Integral a personas con enfermedades avanzadas y sus familiares, que desarrolla la Unidad de Cuidados Paliativos. Y, en el ámbito de la Agricultura, se trabaja conjuntamente en investigación de montes.
En cuanto a Bienestar Social, la Consejería desarrolla desde 1998 el programa de ‘Personas Mayores’ en los centros de mayores del Gobierno regional en colaboración con la Obra Social “la Caixa”. Este programa, que comprende actividades dentro del Marco de Envejecimiento Activo para las personas mayores de la región, se desarrolla en cuatro áreas: promoción de la salud y el bienestar; desarrollo personal y ciclo vital; informática y comunicaciones; y participación social y voluntariado.
En 2016 se desarrollaron 859 actividades en las que participaron 39.460 mayores. Para este año, existen nuevos talleres de las áreas de Salud y Bienestar y de Desarrollo Personal y Ciclo Vital.
Impulsando la cultura y la educación en Castilla-La Mancha
Además de estas líneas de actuación, el acuerdo también contempla acciones en los ámbitos educativo, cultural y de investigación y conocimiento, de acuerdo con el Plan Estratégico 2016-2019 de la Fundación Bancaria. No en vano, la entidad lleva organizando exposiciones en nuestra región desde la década de los 90.
De esta forma, “la Caixa” ha programado durante 2016 en Castilla-La Mancha un total de siete exposiciones, que sumaron un total de 166.352 visitantes en su conjunto. Entre ellas destacan ‘Salgado. Arte en la calle’ en Toledo, ‘Romanorum vita. Una historia de Roma’ en Cuenca, Guadalajara y Toledo, e ‘Ilusionismo ¿magia o ciencia?’ en Albacete y Ciudad Real.
En lo que llevamos de 2017 han podido visitarse las muestras ‘Hablemos de drogas’, en Azuqueca de Henares (Guadalajara); ‘El Ártico se rompe’, en Talavera de la Reina (Toledo); ‘Héroes ocultos. Inventos geniales’, en Cuenca y ‘Tecnorrevolución’ en Villarrobledo (Albacete). A finales de año llegarán ‘Ilusionismo, ¿magia o ciencia?’ a Guadalajara y ‘Salgado. Arte en la calle’, a Albacete.
Por otro lado, y junto a la Consejería de Bienestar Social, se desarrolla el programa ‘Aprender juntos, crecer en familia’, que mediante talleres persigue potenciar el desarrollo de las capacidades de los padres para el cuidado y la educación de sus hijos, acompañándoles en esta tarea y ofreciéndoles colaboración y consejo.
Unas 2.300 familias en situación de vulnerabilidad se pueden beneficiar de este programa que busca corregir las dificultades sociales de las familias de la región en diferentes niveles de riesgo, mejorar sus competencias y prevenir la desestructuración familiar, con una metodología grupal y trabajo intergeneracional en grupos de 14 a 16 adultos y que incorporará después a los hijos.