Puente del Arzobispo (Toledo), 16 de noviembre de 2016.- El Gobierno regional, a través de la Consejería de Fomento, ha invertido un total de 5.845,9 euros en acometer la limpieza y eliminación de grafitis que ensuciaban el puente medieval de piedra de la localidad toledana de Puente del Arzobispo, así como muchos de los elementos del entorno de esta construcción monumental que atraviesa el río Tajo.
 
Los trabajos de limpieza, que han concluido en estas primeras semanas de noviembre y fueron encargados a una empresa especializada en la eliminación de este tipo de pintadas, han consistido en la aplicación de un decapante en gel para quitar las pinturas sin dañar la piedra, tras lo cual se utilizó un producto quita sombras, especial para superficies porosas y para la eliminación de cualquier sombra que pudiera quedar en la zona pintada tras la actuación.
 
Asimismo y para conseguir un resultado óptimo de los productos que han sido necesarios utilizar, se ha aplicado también sobre la piedra agua caliente a presión, empleando para ello una maquinaria que es capaz de controlar los parámetros precisos de temperatura y presión.
 
El director provincial de Fomento, Pascual Aguado, explicaba que al tratarse de un monumento “de gran valor histórico y con tanto arraigo para la localidad toledana de Puente del Arzobispo” se consultó previamente a la Consejería de Educación, Cultura y Deportes la necesidad y viabilidad de la intervención, antes de acometer los trabajos de limpieza y para los que se realizó también un análisis técnico previo sobre los medios adecuados a utilizar.
 
La eliminación de estas pintadas y limpieza del puente monumental fue un compromiso adquirido por el delegado de la Junta en Talavera, David Gómez Arroyo, y el director provincial de Fomento, Pascual Aguado, tras una reunión que mantuvieron sobre el pasado mes de octubre con el portavoz del Grupo Municipal Socialista del Ayuntamiento de Puente del Arzobispo, Miguel Ángel Chico.
 
Este puente de piedra es una joya de la Baja Edad Media que fue mandado construir en 1380 por el entonces arzobispo de Toledo y duque de Estrada, Pedro Tenorio, y fue finalizado en 1388.
 
Realizado en granito, contiene once arcos de medio punto que van disminuyendo hacia los lados. Por el arco mayor, que mide aproximadamente 14,5 metros desde la superficie del agua, discurre todo el caudal del río Tajo.
 
Además, este monumento tiene una gran importancia simbólica para los vecinos de Puente del Arzobispo, pues los cimientos históricos del municipio están ligados a la historia de su puente medieval, dado que la localidad nació con el fin de vigilar y mantener esta infraestructura que era crucial para el tránsito de ganados entre el norte y el sur de España.