El Gobierno regional atenderá a la Comunidad de Regantes de “La Grajuela” en los recursos a los planes hidrológicos
La misma comunidad de regantes ha quedado dividida en dos demarcaciones distintas, lo que les impide aumentar el regadío.
La consejera de Fomento, Elena de la Cruz, se ha comprometido con los afectados a incluir este caso entre las alegaciones que la Junta de Comunidades va a presentar a los Planes Hidrológicos.
Sisante (Cuenca), 12 de febrero de 2016.- La consejera de Fomento del Gobierno regional, Elena de la Cruz, ha afirmado hoy en Cuenca que el Gobierno regional va a asesorar a la Comunidad de Regantes de “La Grajuela”, que agrupa a una serie de pequeños productores agrícolas del Sur de la provincia, a fin de que puedan resolver un caso de división entre dos cuencas hidrográficas que ha calificado como “delirante”.
De la Cruz, que ha mantenido una reunión en Sisante con el alcalde, un grupo de concejales, una representación de los agricultores y a la que también ha asistido el director gerente de la Agencia del Agua de Castilla-La Mancha, Antonio Luengo, se ha comprometido con los afectados a incluir este caso entre las alegaciones que la Junta de Comunidades va a presentar a los Planes Hidrológicos. Los planes fueron aprobados en enero por el Gobierno de España y el Ejecutivo regional prepara un recurso en los tribunales una vez concluya la batería de reuniones con los afectados que están manteniendo las consejerías de Fomento y Agricultura.
Compuesta por más de 400 mancomunados, “La Grajuela” es una agrupación que dispone de 1.700 hectáreas de regadío en los términos municipales de Sisante, Casas de Benítez y Pozoamargo y está integrada en la Junta Central de Regantes de la Mancha Oriental, que tiene su sede en la cercana provincia de Albacete. Los planes hidrológicos “juegan incluso con la geografía”, ha dicho la consejera, ya que dos de los pozos de esta comunidad quedan en una demarcación diferente (Guadiana) a la del resto de sus instalaciones para el aprovisionamiento de agua (Júcar), lo que ha paralizado el proyecto de ampliación de la zona de regadío.
“Está en juego la ampliación de 900 hectáreas más de riego que tienen la calificación de impacto ambiental positiva y con ello el desarrollo de la comarca”, ha afirmado Elena de la Cruz. “Vamos a ver cuál es la situación, les vamos a orientar y vamos a meterlo en los recursos que estamos redactando a los Planes Hidrológicos”, ha indicado la consejera.
En su opinión, este caso es un reflejo “del maltrato que se está haciendo a Castilla-La Mancha en materia de agua” a consecuencia de los Planes y la redefinición de algunas demarcaciones. De la Cruz ha calificado este maltrato de “brutal”, aseverando que “no puede continuar esta situación”.
Por el momento, la Junta Central de Regantes de la Mancha Oriental ha elaborado un estudio para determinar la línea divisoria entre ambas cuencas en esta zona y ha presentado alegaciones contra la partición planteada en el Plan Hidrológico.