El Gobierno de Castilla-La Mancha coordina con FEDACAM la adaptación de su actividad con motivo de la COVID-19
La consejera de Bienestar Social, Aurelia Sánchez, ha destacado la adaptación de la actividad de la Federación de asociaciones de Alzheimer y otras demencias de Castilla-La Mancha con motivo de la COVID-19, y ha puesto en valor los más 18.000 contactos telefónicos que han realizado desde el pasado mes marzo, así con la distribución de materiales cognitivos, acompañamiento a enfermos y familiares, y el mantenimiento de los grupos de autoayuda de manera telemática.
Asimismo, el Gobierno de Castilla-La Mancha destina casi tres millones de euros para mejorar la calidad de vida de las 54.000 personas afectadas de Alzheimer y sus familias que hay en la región, a través de las 38 entidades que integran FEDACAM.
Toledo, 25 de mayo de 2020.- El Gobierno regional coordina con la Federación de asociaciones de Alzheimer y otras demencias de Castilla-La Mancha (FEDACAM), la adaptación de su actividad con motivo de la COVID-19.
Así lo ha indicado la consejera de Bienestar Social, Aurelia Sánchez, durante una videoconferencia de trabajo y coordinación con la presidenta de FEDACAM, Inés María Losa y algunos representantes de la entidad, en la que ha estado acompañada por la viceconsejera de Promoción de la Autonomía y Atención a la Dependencia, Ana Saavedra.
Aurelia Sánchez ha destacado la adaptación de la actividad de la Federación con motivo de la COVID-19 y ha puesto en valor los más 18.000 contactos telefónicos que han realizado desde el pasado mes marzo, así como la distribución de materiales cognitivos, acompañamiento a enfermos y familiares y el mantenimiento de los grupos de autoayuda de manera telemática.
FEDACAM
Además, la titular de Bienestar Social ha indicado que el Gobierno de Castilla-La Mancha destina casi tres millones de euros para mejorar la calidad de vida de las 54.000 personas afectadas de Alzheimer y sus familias que hay en la región, a través de las 38 entidades que integran FEDACAM.
Sánchez ha puesto en valor la colaboración “para que, pronto, los centros y servicios caminen hacia la normalidad, una nueva normalidad, de una manera distinta en la prestación de los servicios, pero las personas afectadas de Alzheimer y sus familias lo necesitan”.