El consejero de Hacienda lamenta que las entregas a cuenta a las Comunidades Autónomas se tengan que destinar a amortizar la deuda
Juan Alfonso Ruiz Molina ha manifestado su temor a que esos ingresos las Comunidades Autónomas no los puedan destinar a mejorar los servicios que prestan a los ciudadanos.
Madrid, 29 de julio de 2015.- El consejero de Hacienda y Administraciones Públicas de Castilla-La Mancha, Juan Alfonso Ruiz Molina, ha manifestado hoy su temor a que el importe de las entregas a cuenta a las Comunidades Autónomas para el próximo año se tenga que dedicar a la amortización de la deuda contraída en vez de a mejorar la calidad de los servicios a los ciudadanos.
Ruiz Molina, tras asistir al pleno del Consejo de Política Fiscal y Financiera en Madrid, ha señalado que durante el mismo el ministro de Hacienda ha hecho afirmaciones que parecen indicar que “los ingresos los tendremos que destinar más a la amortización del déficit de la deuda que tenemos contraída que a la prestación y a la mejora de los servicios de los ciudadanos”.
En relación con este asunto ha añadido que deberán seguir discutiendo porque “la aplicación de la regla de gasto anularía por completo los beneficios que podríamos obtener del incremento de la financiación destinada a los servicios que prestan las Comunidades Autónomas”.
Durante el pleno del Consejo de Política Fiscal y Financiera el consejero ha votado en contra de la imposición del déficit que se había fijado para los tres próximos años.
A preguntas de los medios, el titular de Hacienda y Administraciones Públicas ha indicado que las Comunidades Autónomas desconocen la metodología y los criterios en los que se ha basado el Ministerio para hacer la distribución del déficit entre el Estado y las regiones.
En este mismo sentido ha criticado la “rigidez del ministro” porque se le ha solicitado que la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) realice un estudio sobre este asunto, algo a lo que Montoro se ha negado. “Oscurantismo a un dato que es importante para los ciudadanos de la región en la medida en que la distribución del déficit entre el Estado y las Comunidades Autónomas repercute directamente en los ciudadanos”, ha concluido.