El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano Garcia-Page, ha afirmado que en una provincia como Cuenca, que representa muy bien el fenómeno del despoblamiento, el dato que acabamos de conocer, dos mil habitantes más en el último año, rompe una inercia y nos indica que vamos por el buen camino. Según Page, esto tiene que ver con las leyes, con los impuestos, pero fundamentalmente con los servicios públicos. Se ha mostrado muy satisfechos y considera que hay que mantener esta política constante en el tiempo.