“Todos somos conscientes que las temperaturas y el estrés hídrico son más propias del mes de junio o julio, y eso nos ha llevado a movilizar desde mediados del mes de marzo a buena parte de nuestro operativo. Afortunadamente, tenemos un dispositivo que trabaja los 365 días del año, incidiendo en la prevención, pero dado que las temperaturas no van a cambiar, tenemos que extremar las precauciones”, ha pedido Escudero.