"A nivel nacional es el momento de plantearse realmente -ellos sí tienen la competencia para hacer una prohibición taxativa- aplicando su competencia en materia de Energía, se prohíba la práctica de la fractura hidráulica en toda España, porque no tenemos la garantía de que no sea un problema para la salud pública y el medio ambiente. Por eso, lo que hemos hecho en Castilla-La Mancha es poner por delante los intereses de los ciudadanos de la región", ha explicado el consejero de Agricultura, Medio Ambiente y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo.