“La puesta en marcha de actividades formativas de ahorro energético en los hogares, actividades que van a ir dirigidas a los profesionales de los servicios sociales para que puedan ayudar a las familias en dos aspectos fundamentales, en la mejora de la eficiencia energética en los hogares donde hay personas vulnerables pero también para minimizar el coste de los suministros energéticos en las familias. No solamente hay que ayudar a las familias sino trabajar en la prevención y trabajar en la formación y en el apoyo del ahorro energético no tiene que ser una asignatura pendiente tiene que ser una realidad y está contemplado en el convenio 2019 de la Consejería de Bienestar Social y Cruz Roja".