2018 ha sido el año en el que hemos conseguido afianzar los servicios y derechos que Emiliano García-Page comenzó a recuperar para la ciudadanía de Castilla-La Mancha al llegar a la presidencia de esta Comunidad Autónoma. Los mayores avances se han producido en el ámbito social, que fue el más castigado durante la anterior legislatura. Sin más dinero, sin más posibilidades de gastar, pero con unas prioridades completamente distintas al anterior Gobierno, hemos demostrado que es posible construir una región más próspera, con más empleo, con menos desigualdades sociales y con más igualdad entre mujeres y hombres.