Estrategia Regional Frente a la Despoblación en Castilla-La Mancha 2021-2031
La Ley 2/2021, de 7 de mayo, de Medidas Económicas, Sociales y Tributarias frente a la Despoblación y para el Desarrollo del Medio Rural en Castilla-La Mancha, tiene un carácter multisectorial y transversal en las actuaciones, con la finalidad primordial de procurar servicios básicos adaptados a las necesidades de su población, posibilitando la igualdad de oportunidades efectiva para sus habitantes, y la cohesión social y territorial del medio rural. Dado que dicha Ley tiene vocación de que el reto demográfico tenga continuidad en el tiempo, se establece que la Estrategia Regional frente a la Despoblación 2021-2031 (en adelante ERD) es el principal instrumento de planificación para abordar el desarrollo de las 26 zonas rurales escasamente pobladas y en riesgo de despoblación de la región, que incluyen 721 municipios (79% del total), con una población de 438.024 habitantes (21% del total) y, que ocupan el 73% de la superficie regional.
La característica más significativa del proceso de elaboración de la ERD ha sido el alto nivel participativo logrado, tanto a nivel institucional, como de la ciudadanía y de los actores económicos y sociales implicados en la materia. Además, ha sido informada favorablemente por unanimidad de los representantes del Pleno del Consejo Regional de Desarrollo del Medio Rural y frente a la Despoblación en Castilla-La Mancha.
El objetivo general de la ERD en Castilla-La Mancha es favorecer el asentamiento y fijación de población, facilitando el desarrollo de nuevas actividades económicas y el fomento del emprendimiento, y garantizando la igualdad de derechos y oportunidades de las personas que viven en las zonas rurales afectadas por la despoblación. Dicho objetivo final se despliega en cuatro ámbitos de actuación (servicios públicos, económico, social y territorial), con sus cuatro objetivos estratégicos (asegurar el acceso a unos servicios públicos básicos, propiciar la cohesión económica, avanzar en la cohesión social y promover la cohesión territorial). El alcance de los objetivos estratégicos se instrumentaliza a través de un conjunto de actuaciones organizadas en 23 líneas de actuación repartidas en los cuatro ámbitos de actuación. Además, dentro de cada línea de actuación se han definido una serie de objetivos específicos, que suponen un total de 57, y que sirven de vectores para avanzar en la consecución de los objetivos estratégicos. A su vez dentro de estos objetivos específicos, en la base misma de la Estrategia, se han identificado las 210 actuaciones que se van a llevar a cabo durante su periodo de vigencia, para hacer frente al reto de la despoblación.
La ERD tiene una vigencia de 10 años y contempla un sistema de evaluación y seguimiento en varias fases a lo largo del tiempo. Cada cuatro años se plantea una revisión intermedia que corresponde en el tiempo con los años 2025 y 2029, y al final del periodo de vigencia de la Estrategia a los diez años en 2031, se realizará la evaluación final para analizar los resultados logrados en cuanto a la consecución de los objetivos marcados y el impacto de la propia Estrategia. El sistema de seguimiento y evaluación está estrechamente ligado con el modelo de gobernanza compuesto por tres componentes: gobernanza interna (Comisión Interdepartamental frente a la Despoblación), gobernanza abierta y participativa (Consejo Regional de Desarrollo del Medio rural y frente a la Despoblación) y espacios para la escucha y el diálogo entre los agentes implicados.
Por último, la ERD incorpora una memoria con la estimación del presupuesto total asignado a la implementación de la misma para el periodo completo de vigencia 2021-2031, que asciende a un total de 3.322.055.590 euros.