Son servicios de atención diurna que tienen como objetivo principal potenciar los puntos fuertes de las personas con discapacidad y facilitar el aprendizaje de nuevas capacidades en todos los ámbitos de la vida de la persona (autonomía personal, relaciones interpersonales, utilización de los recursos comunitarios y capacidad de toma de decisiones), haciendo especial énfasis en las habilidades de carácter laboral para facilitar su acceso al empleo normalizado y siempre sobre la base de sus preferencias y con el uso de apoyos personales.
 
       Su característica fundamental es que se desarrolla en el entorno comunitario y normalizado donde se desenvuelve la persona, es decir, en los centros de formación existentes en el barrio, en la localidad, en la biblioteca, en la empresa o en el lugar de trabajo.
 
       Pone el foco en los intereses y motivaciones de la persona con discapacidad que participa en todas las decisiones que le afectan y en la organización del servicio, de ahí que los apoyos prestados deban adaptarse a las características de la persona, a sus necesidades, a sus objetivos personales, a las actividades propuestas, así como a los horarios en las que se desarrollan.
 
       En Castilla La Mancha, conforman la red pública 35 servicios de capacitación prestados por 27 entidades en el entorno comunitario, que cuentan con una participación aproximada de 1.200 personas con discapacidad.
 
       Para solicitar más información sobre estos recursos puede dirigirse a las Delegaciones de Bienestar Social de su provincia, a los Centros Base de referencia o al personal de trabajo social de su localidad donde se facilitará el modelo de solicitud.