Este protocolo refuerza una idea que desde el Gobierno regional venimos impulsando con firmeza: que la sostenibilidad y el desarrollo pueden y deben ir de la mano. Que es posible avanzar en la implantación de energías limpias cuidando a la vez de nuestro patrimonio natural. Y es que este servicio se pone en marcha sin necesidad de dotación económica adicional, ya que se integra en el marco de las medidas compensatorias requeridas por la administración regional al proyecto de las plantas solares fotovoltaicas que Repsol Renovables desarrolla en los términos municipales de Budia, Henche, Cifuentes y Solanillos del Extremo.