El presidente dice entender que en Cataluña quieran mejorar su financiación pero la financiación de Castilla-La Mancha “no se va a decidir en Cataluña ni en sus elecciones”. Cree que sería “muy bueno separar la tensión independentista, de la financiación de los servicios públicos” no sea que alguien pueda estar pensando “que estamos cambiando sentimientos por euros”. “Los sentimientos no se cambian por euros”, añade el presidente, y si alguien está en esa tesis “ya les digo que como presidente de CLM aquí también sentimos y también necesitamos”.